lunes, 23 de marzo de 2020

En modo difícil


Mi marido siempre dice que en la vida, nos ha tocado jugar en "modo en difícil". Nuestra generación ha tenido que enfrentarse a un complicado panorama social y económico que ha ralentizado y retrasado todas las expectativas y objetivos que pudiéramos tener. Una pandemia global era lo que nos faltaba para rematar la partida. Hace 4 meses cuando nos casamos, no podíamos imaginar lo que se nos venía encima. Por suerte, la cuarentena a la que nos hemos visto forzados debido al coronavirus me ha servido para reconfirmar que tengo el mejor compañero de vida, porque a pesar de estar tan preocupado como todos, siempre tiene un consejo acertado y un mimo, o una sonrisa y una broma a tiempo... Y eso viene genial según avanzan los días y el ánimo va decayendo.
No voy a mentir, aunque al comienzo me tomé el encierro sorprendentemente bien, el agobio empieza a pesar, pero también es cierto que puede ayudar entender este período como una oportunidad de aprovechar para hacer las cosas que normalmente no podemos (yo estoy aprovechando para cocina o probar maquillajes como hacía mucho tiempo que no): el estrés del día a día es uno de los peores aspectos en nuestra vida, yo empecé el año muy mal en ese sentido, y esto diría que, pese a todo, me está viniendo hasta bien en muchos sentidos (luego una se va a la cama y se empieza a comer la cabeza igualmente, pero bueno...). Incluso en las situaciones más extremas, como si pierdes tu trabajo (es muy fácil decirlo, más si aún lo tienes, lo sé), se puede intentar sacar, si no algo positivo, al menos una lección: a lo mejor ese empleo no era para ti. Empezar de cero siempre es duro, y quizás esto era el empuje que necesitabas para hacerlo, al igual que para tomarnos las cosas con más calma. A nosotros, teniendo por suerte aún trabajo los dos, nos está sirviendo incluso para ahorrar, y poder hacer más adelante todos esos planes que dije en la publicación anterior.

Pero aunque me quejara mucho, visto en perspectiva, ahora que no la tengo me doy cuenta de que me encantaba mi vida complicada. Y cuando todo este caos pase, el modo de enfrentarla seguirá siendo difícil, no nos engañemos... Pero nosotros también seguiremos jugando; no queda otra. 

miércoles, 18 de marzo de 2020

Stand by


Tocan días complicados, de parar toda nuestra actividad cotidiana y (lo que más me cuesta) vivir el día a día y no hacer planes a la larga. Desde luego, el encierro está sirviendo para cultivar la paciencia y el relax de muchos, yo la primera. Lo que sí podemos pensar, y sobre todo valorar, es lo que queremos hacer en cuanto se termine esta cuarentena y podamos volver a salir a la calle. De las cosas más inmediatas a las más lejanas, pero sobre todo, comprendiendo que muchas de ellas las dejamos para "otro día", sin saber que ese otro día puede venir un virus que te obligue a quedarte en casa un tiempo indefinido, y entonces te arrepientas. Vamos con ello:

1. Tomarme un vermut en una terraza.
2. Ver a mi familia y a mis amigos.
3. Ir de tapeo.
4. Pedir sushi y/o pizza.
5. Pasar un día entero en el centro de Madrid.
6. Comer y/o cenar en alguno de nuestros restaurantes favoritos.
7. Ir al cine.
8. Ir a Madrid Río.
9. Ir al Rastro.
10. Salir por algún bar rockero. 
11. Ir al teatro.
12. Ir a la Puebla y a Valencia.
13. Ir a conciertos.  
14. Planear más viajes.
15. Ver el mar. 
16. Ir de compras. 
17. Ir a Nueva York.

... y muchos más!!