domingo, 13 de mayo de 2012

Melocotones helados

"Rodrigo se sentó juntos a ella y le dio la flores. Callaba. De pronto, Elsa se volvió a él.

- Ven conmigo. Vámonos a Duino, pero vamos los dos juntos. Podemos coger un piso, y así no tendré necesidad de vivir con mi abuelo - le abrazó. Apoyó la cabeza sobre el hombre del chico y le empujó, como un cordero que peleara contra otro-. No es así como habíamos pensado que irían las cosas, pero otros han decidido por nosotros. Puede ser una oportunidad si sabemos aprovecharla. 

En realidad, quería decir: demuestra que me amas, sácame de aquí, sé mi héroe."

(Melocotones helados, Espido Freire)

Llevo dos días con este libro, y ya me apasiona...


"No quiero un final feliz, sólo quiero serlo. Repartir el amor, retrasar el momento de irnos. Y al despegarnos no dejar inmolarse el pecho. Repartir el placer, prolongar el encanto de vernos..."



P.D. Soñar. Soñar y sentir en ese sueño más de lo que has sentido en tu vida real. Sentir más cariño, amor, pasión y emoción de lo que nunca has hecho. Soñar, y ser feliz. Y despertarte, volver de golpe a la realidad, y sentir una profunda melancolía por algo que nunca tuviste.

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